Propiedad intelectual
El Congreso de Estados Unidos está considerando proteger mediante copyright los diseños de moda, desde los vestidos a los zapatos pasando por los cinturones y las monturas de las gafas.
Tras la exposición de Albert Esplugas de su artículo sobre propiedad intelecual en el Instituto Juan de Mariana, se produjo un coloquio posterior que inspiró estas reflexiones con respecto a ese mismo asunto.
¿Tienen los individuos derechos sobre las creaciones intelectuales, como inventos o escritos? ¿Debería el sistema legal proteger esos derechos?
La propiedad intelectual, en su sentido anglosajón, es un término amplio que comprende distintas categorías de derechos legales que se derivan de algún tipo de creatividad intelectual.
Réplica a la segunda lectura de una enmienda que buscaba extender el término del copyright a sesenta años, contados desde la muerte del autor.
He recibido recientemente algunos mensajes preguntándome si hay alguna razón a favor de la existencia de la propiedad intelectual.
Imagínese, querido lector, que va tranquilamente por la calle y unos individuos de aspecto fiero y desaseado deciden que esa noche se van a correr una juerga con un presupuesto equivalente al que usted tiene en ese momento en el bolsillo. Más concretamente con el que usted tiene en el bolsillo.
Entre los medicamentos de Ýfrica y el caso Napster y otros, las patentes y los derechos de autor están sobre el tapete. Aunque ambos son ampliamente defendidos, incluso por liberales, en tanto que indispensables estímulos para la innovación y el arte, cabe preguntarse: ¿es propiedad la propiedad intelectual?
Patentes y copyrights son formas especiales de "propiedad" inmaterial, que otorgan a sus propietarios o beneficiarios el derecho exclusivo de controlar la producción y venta de un determinado producto una obra literaria o artística en el caso del copyright, un invento o proceso productivo en el caso de las patentes.